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Mostrando entradas de diciembre, 2012

"tú tienes la culpa de todo este desastre"

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Desde que empezamos llevo ya unas cuantas copas de indiferencia y desencanto encima, y ya empezamos a desangrarnos de desamor por las esquinas. Y yo necesito marchar de aquí, que me digas que haga las maletas, que nos vamos lejos a intenta rlo otra vez, que yo aceptaría sin pensarlo; pero si no me lo dices me iré yo solo por mi cuenta. Y cuando me vaya lo primero que haré será ir al lugar donde nos dimos el primer beso, y allí pensaré que quizá tu ya no te acuerdas del principio, y enterraré nuestros bailes en que nos pisábamos los pies, y los otoños y nuestras caídas, y lo llenaré todo de flores, porque aunque un final siempre es un final, prefiero que huela a flores antes que a rencor. Y cogeré mis maletas, me abrocharé el abrigo y me iré sin mirar atrás, porque si miro lo veré todo lleno de color por fuera, y me volveré a engañar, y no veré lo que esconden esas flores. Entonces llegaré a un sitio donde pueda poner la música que tanto odiabas lo más fuerte que quiera, donde haya alg

Y.

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"Felicidad. Eso es lo que siento al verte aparecer a lo lejos, cuando sé que somos eternos, porque aún te pones nerviosa al verme, te tiembla la mirada, y sé que sigues estando aquí, bien dentro, porque nunca te fuiste. Entonces llegas, nos sentamos, y aún nos tiemblan los rodillas y ponemos de excusa que hace frío. Y nos convertimos en Diciembre, llenándolo todo de nieve, de amor. Nos acariciamos ...  y me encantaría que te quedases a vivir entre mis manos. Me pierdo entre tu cuello, mis ganas. Y siempre serás mi lluvia, porque cuando apareces me desbordas de amor, de vida, por cada vértice. Y me gustaría leerte los lunares de tu espalda, y quedarme a vivir en esos pequeños planetas, que tú conviertes en universos con tu sonrisa. Quien nos ha visto volar sabe que llegamos muy lejos. Y ahora me llevas a pasear por las hojas caídas que adornan la tierra húmeda de este parque, y nos miramos, y ya está todo dicho. Y hacemos poesía. Y nos refugiamos del frío, en bar con sillas de ma